Ya estoy mejor...

Han sido unos días durillos, y no precisamente por la consistencia de las heces, todo lo contrario.

A nadie le agrada estar con 38.8ºC de fiebre por la noche, tres noches seguidas. Por no mentar las visitas constantes al Sr. Roca, para evitar un gotelé color marrón (con tonos afrutadillos o a perro mojado) en la pared de tu cuarto.

Y es que lo mismo llega tu madre a preguntarte: "¿Cómo estás hijo mío?" y tú eres capaz de contestarle: "Yo bien, pero el microondas me debe dinero", o que te lo pregunte, salir disparado (aka cagando virutas) hacia el baño, depositar el contenido putrefacto de tus intestinos, y decirle, por eso de no perder el sentido del humor (a pesar del dolor), "Te das por enterada, o te envío un fax".

Bien, pues para celebrar que ya puedo comer hasta una hamburguesa pija (para no hacer mucha publicidad), sin que ésta salga ipso-facto por alguno de los agujeros de mi tracto digestivo, voy a recordar un chiste que le conté a la nº 1 (de mis millones de fans), durante este período de cautiverio, y que, como veréis, es idóneo para la ocasión.


Se encuentran dos galenos sentados en una parada de bus, viendo a la gente pasar, diagnosticando sus dolencias por sus gestos y/o/u (ae ae) sus andares. En esto que un transeúnte llama su atención, quizás por llevar un andar excesivamente lento y algo tosco. Con presteza los doctores, determinan la dolencia del viandante.

-Pues fíjate que este hombre, así por su forma de andar, con lentitud, con extraña posición encorvada... yo creo que lo que tiene esta persona es reuma.

-No, querido colega, creo que en esta ocasión no voy a estar de acuerdo contigo. Este hombre sin duda lo que tiene es sífilis.

Puesto que los médicos no llegaban a un acuerdo y tras realizar una apuesta (sin pelo por el medio) deciden acercarse al "paciente" para preguntarle por su afección y saber quién de los dos propuso el diagnóstico acertado.

-Disculpe señor, aquí mi colega y yo le hemos visto y no hemos podido evitar el intentar averiguar cuál es la dolencia que usted padece. Mi colega cree que es reuma, y yo creo que es sífilis.

A lo que el "paciente" contesta:

-Pues yo creo que los tres estámos equivocados.

-¿¿¿Cómo que los tres???

-Sí, porque yo creía que era un pedo...y me he cagado.


Bueno, ya para terminar, y para que no parezca que solo puedo hablar de heces y excrecencias, os voy a dejar un pedazo de código que me he currado que he copiado de otro sitio y que a mi me hizo mucha gracia. Sé que os va a gustar, si no, no habríais leído hasta aquí.

La verdad está ahí fuera